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| Foto: B.A.S.S. Communications / Shaye Baker |
En Estados Unidos saben muy bien que la pesca como deporte tiene un valor económico añadido. El desarrollo de una modalidad como la pesca de bass supone para las regiones una importante aportación económica: los pescadores, aunque no sean profesionales, van con sus familias, duermen, comen, visitan el comercio (tiendas de pesca u otras), compran combustible para sus barcos y coches, etc. La realización de una importante competición atrae a miles de personas y, si tiene una buena cobertura mediática, es un excelente reclamo para la ciudad que la acoge. Por ello, en Estados Unidos, las ciudades disponibilizan dinero para acoger ese tipo de eventos. Muy recientemente, el Gobernador del Estado de Nueva York, Andrew Cuomo, asistió a una competición de la Elite de B.A.S.S. realizada en su estado para anunciar que en 2014 la Elite vuelve a Nueva York, como resultado de un acuerdo celebrado entre las dos instituciones. Cuomo señaló que se trata de una oportunidad para divulgar ampliamente las posibilidades de vacaciones y de práctica de la modalidad que el Estado ofrece. De esta forma, además de la competición de la Elite, habrá demostraciones de pesca y un banquete para atraer a la región visitantes de otras zonas.
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